¡A coser y a quejarse!

¿Sientes que hay mucho para quejarse en esta vida? ¿No te alcanza el día para quejarte? ¿Qué te parece si nos juntamos y reclamamos como grupo?
En más de 300 ciudades, grupos de Stitch’n Bitch (Coser y quejarse) organizan reuniones sociales para conversar mientras cosen, bordan y tejen a mano. El término se remonta a la Segunda Guerra Mundial, cuando ciertos grupos sociales, políticos y étnicos rara vez encontraban lugares seguros pare reunirse.
Una sesión pública de coser no solo resulta relajante sino también expresiva. Tiene que ver con reclamar y reinterpretar los roles tradicionales en el espacio público. Para algunos, también expresa individualismo y anticonsumismo.

Si no se te ocurre nada de qué quejarte, tenemos algunas sugerencias para ti.

El hecho de que:
* 78 países penalicen las relaciones entre el mismo sexo.
* 70% de la población mundial viva bajo gobiernos que limitan la libertad de expresión y reunión de las comunidades LGBT.
* En Europa, 16 países les nieguen a las personas trans el derecho a cambiar su nombre y género en documentos oficiales.
* 23 de los 33 países que permiten el cambio de nombre y género en los documentos exigen la esterilización como requisito previo. Y 19 países exigen el divorcio.
* Apenas 7% de la población mundial se beneficia con leyes expresas que limitan el discurso discriminatorio contra las minorías sexuales y de género.
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